Cuando mi hija era muy bebé no entendía que una mamá se queje de tener que gastar tanto dinero en baberos, para mí era sencillo: unos 7 baberos me cubrían toda la semana. Comprendí la situación cuando unos meses después mi hija empezó la guardería: 3 por día en una bolsita, y como un día no lave ropa estaba crucificada al otro día. Tuve que hacerme con unos cuantos baberos más, hasta tener un stock razonable. Fue ahi en donde empecé a quejarme de aquello!
Una solución muy ingeniosa son estas presillas para enganchar a cualquier repasador :
En casa te salva de usar los baberos, de modo que quedan reservados solo para la guardería. Tambien se le puede poner una servilleta descartable, y como es un objeto pequeño se puede llevar a todos lados. Ejemplo: Estas en un restaurante, no llevaste baberos o el que llevaste ya esta super sucio, le pones una servilleta del restaurante y no te llevarás nada sucio a casa!
¿No es genial?
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